“El Pirineo de Huesca tiene las aves más singulares y más abundantes”

Para poder ver pájaros es necesario formar parte del silencio, dijo el escritor irlandés Robert Lynd (1879-1949). “Y una guía de aves y unos buenos prismáticos”, apostilla el ornitólogo holandés afincado en Huesca Kees Woutersen.

El turismo ornitológico no ha dejado de crecer en las últimas décadas en el Alto Aragón, especialmente el turista nacional, señala Woutersen, socio del Grupo Ornitológico Oscense, guía y tour operador especializado en traer grupos de turistas ornitológicos extranjeros a la provincia, actualmente jubilado. “Vine en 1979 como turista ornitológico a España, cuando nadie sabía qué significaba esa palabra. Tras varias idas y venidas a mi país me acabé quedando en Huesca”, explica.

Lo mejor de la provincia para el avistamiento de aves es el Pirineo, afirma con rotundidad el experto, quien considera Sobrarbe y la Sierra de Guara como zonas estratégicas para la observación.

Holandeses, ingleses, belgas y alemanes se han interesado tradicionalmente por el Pirineo a la hora de visitar nuestro país para ver aves, pero en los últimos quince años Guara se está posicionando como otro destino clave. “El turista combina alta montaña con zonas en las sierras exteriores y en el sur de la provincia, como las estepas de Los Monegros en las que ya casi no se puede ver nada porque han caído bajo la agricultura intensiva”, lamenta.

De toda la cordillera pirenaica, “lo mejor está en la provincia de Huesca”, resalta. Ni Navarra ni Cataluña, Aragón tiene “los paisajes más naturales, con más abundancia de aves y con los ejemplares más singulares”, subraya.

Entre las especies más llamativas, el experto destaca el buitre que, aunque para nosotros es una común y abundante, despierta mucho interés en el turista extranjero. En este sentido, el ornitólogo indica que “más del 80 % de los buitres de Europa están en España y, de ellos, el 10 % se pueden ver en Huesca”. Ocurre algo parecido con el quebrantahuesos, “la mitad de la población europea está en Huesca”, por eso es otra de las especies más buscadas, junto con “el alimoche, el águila culebrera o el halcón peregrino”.

La provincia alberga muchos rincones ideales para observar aves y Kees Woutersen los sabe todos. Cita algunos como el mirador que hay en el centro de visitantes de Riglos y el de Sarsamarcuello. Del Parque Nacional, destaca los miradores de Ordesa, también sitúa puntos estratégicos en San Nicolás de Bujaruelo y el valle de Otal. Más al sur, la zona de Vadiello es un entorno muy bueno para avistar aves, afirma, al tiempo que recomienda ir a la presa y quedarse allí una hora, formando parte del silencio, como decía Robert Lynd.