“Mucha gente se va porque no se puede vivir aquí”

Los alquileres turísticos y las ventas para segundas residencias han elevado el precio de la vivienda en el Valle de Benasque dificultando el alojamiento de los trabajadores de temporada y el asentamiento de familias que querrían quedarse en la zona de forma permanente. 

“Trabajamos los dos en Benasque, pero estamos de alquiler en El Run porque en Benasque lo poco que sale para alquilar o comprar no nos lo podemos permitir”, explica la madre de una familia que optó por quedarse en el valle hace tres años. La inmobiliaria donde trabaja Laura Melluso solo gestiona pisos de larga duración, “no tocamos pisos turísticos, y entra uno cada 5 meses”, explica. “Es muy difícil encontrar pisos de alquiler de larga duración en el Valle de Benasque y lo que te sale es a precios muy altos porque la gente prefiere dedicarlos al turismo. De los turísticos, solo el 50 % son legales, por eso no los trabajamos”, asegura.

Melluso alude a los problemas con la gente de temporada. “Si consigues algún piso para trabajadores de la estación, por ejemplo, te exigen contratos del 1 de diciembre al 30 de abril, aunque la temporada termine antes y piden que se pague toda la temporada por adelantado”, por lo que han de adelantar unos 6.000 euros antes de empezar a trabajar, ya que pocos alquileres bajan de 1.000 euros en Benasque.

Respecto a la venta, esta profesional inmobiliaria explica que al “dispararse” la obra nueva, ha subido también mucho la segunda mano, “con pisos de 56 metros a 240.000 euros en un edificio de 25 años”, indica. “Ahora mismo hay necesidad de la gente joven para alquilar y comprar”.

Una vecina que se trasladó con su familia hace tres años padece esta situación. “Hemos intentado conseguir una vivienda en Benasque y lo mínimo de alquiler son mil euros. No hay facilidades de alquiler ni de compra, que ya te vas a los 300.000 euros o más. Mucha gente se está yendo porque no se puede vivir aquí”.