El agresor de La Fueva vería rebajada su pena de cárcel a 6 años

Visto para sentencia el juicio en la Audiencia Provincial de Huesca al vecino de La Fueva acusado de agredir sexualmente durante más de una década a cinco chicas menores de edad. Tras la testificación de dos de las jóvenes, los forenses y las psicólogas que formaron parte de la investigación, el Ministerio Fiscal se ha adherido al acuerdo entre acusación y defensa de una pena de prisión de seis años y 15 días de cárcel, el pago de una indemnización de 147.000 euros y una orden de alejamiento de la provincia de Huesca.

Queda por determinar en la ejecutoria del juez el grado de dicha orden, que una de las acusaciones, representada por el letrado Javier Osés, espera que sea “de por vida” mediante diez años por cada menor agredida. Mientras que la defensa del acusado, a cargo de Francisco García Belenguer, difiere entre cumplimiento “sucesivo” y “simultáneo”, puesto que el acusado ya ejecutó parte de ese alejamiento tras su detención, además de que las agresiones se remontan a 2005 y, en este tiempo, ha habido varias modificaciones del Código Penal.

En lo que respecta a la condena del acusado, para quien el Ministerio Fiscal pedía 30 años de cárcel, tras reconocer en su testimonio las agresiones, se acogió a la aplicación del atenuante muy calificada de reparación del daño mediante una indemnización con el fin de rebajar las penas. “Este dinero está muy por encima de lo que los forenses estimaron y entre el 80 % y el 90 % está dirigida a la reparación de daños”, sostiene su abogado.

El abono íntegro del dinero como responsabilidad civil ya ha sido entregado a las víctimas según el grado del delito. “No siempre una imposición de prisión mayor implica más justicia”, valora su abogado, cuyo cliente se acogió al ejercicio de derecho “precio in doloris” que, en materia de responsabilidad, acuerda una indemnización para compensar o reparar los sufrimientos físicos o morales experimentados por una víctima de una determinada lesión. Dicho esto, ha recordado que “el acusado entrará en prisión próximamente por un mínimo de cuatro años”.

Durante la jornada de este jueves, testificaron en audiencia privada dos de las menores agredidas a quienes realizó tocamientos y besos en diversos encuentros en los cuales las invitaba a dar paseos en su tractor y su “pick-up”. 

También los psicólogos y peritos forenses que relacionaron el síndrome postraumático que padecieron algunas de las jóvenes como una causa directa del abuso, de que les ha provocado trastornos neuróticos graves. Pese a percibir “ansiedad”, “miedo” o “encapsulamiento”, han validado completamente sus testimonios, desde el primero hasta el último.