Somontano

SUCESOS

Amenazó con "quitarse la vida" si no volvían a estar juntos

La Fiscalía pide 25 años de prisión por agresión sexual a una menor de 16 años

Primera sesión del juicio por agresión sexual a una menor este miércoles en la Audiencia Provincial de Huesca.
Primera sesión del juicio por agresión sexual a una menor este miércoles en la Audiencia Provincial de Huesca.
S.E.

Celos, infidelidades, amenazas a sus amigos, a sus padres, encuentros casuales, vigilancia desde su vehículo… Son los alegatos que se han proferido este miércoles en la Audiencia Provincial de Huesca sobre el presunto acusado de agredir sexualmente a una menor de 16 años en Barbastro y para quien la Fiscalía pide 25 años de prisión.

La joven, testigo protegido, prestó declaración en 2021 sobre la agresión, a la que ella se negó y él se colocó encima consumando la acción. Además, se presentaron denuncias previas a la Guardia Civil por ambas partes y la instrucción del Juzgado de Barbastro decretó el ingreso del joven en el Centro Penitenciario de Zuera.

La relación sentimental que mantuvieron entre 2018 y 2020, él con 23 y ella con 15 años, fue buena en sus primeros momentos, “todo el pueblo lo sabía y no nos escondíamos de nadie”, ha admitido el joven.

Tras la ruptura, el 2 de febrero de 2020, día de la Candelera, han conminado las partes, le amenazó con “quitarse la vida” si no volvían juntos, además de increpar a sus nuevas parejas y a sus amigos, a los que enviaba mensajes de Whatsapp desafiantes esgrimiendo a una de ellas: “te estamparé contra un bordillo si no la dejas en paz”.

En un episodio en una discoteca de la localidad del Somontano, la joven y su nueva pareja tuvieron un encontronazo con el acusado. Cara a cara, ambos jóvenes conversaron y el acusado le aseguró que “era una persona muy importante en su vida y quería hacer todo lo posible para recuperarla”.

Los padres de la denunciante testificaron que también sufrieron sus amenazas durante meses, hasta el punto que resaltaron que su hija “tenía miedo de salir a la calle”.

Ellos mismos consintieron la relación al comienzo, a pesar de que les aconsejaron lo contrario con comentarios que vertieron a la madre los vecinos. “Le intenté tratar como a un hijo y así nos lo pagó”, ha lamentado la madre, que autorizó que el joven subiera a su casa, aunque han remarcado no tenían conocimiento de que mantuvieran relaciones sexuales.

Ahora, la fiscalía reclama para el procesado la pena de 14 años de prisión por el delito de agresión sexual a menor de edad, cinco años de prisión por el delito de abuso sexual a menor de dieciséis años, una pena de tres años de prisión por el delito de violencia habitual. Además, por cada uno de los tres delitos de coacciones, solicita tres años.

Asimismo, argumenta que en los dos delitos cometidos contra la libertad sexual concurre en el procesado la circunstancia mixta de parentesco en su modalidad de agravante.

Finalmente, reclama cuatro meses de multa, a razón de ocho euros diarios. Además pide para el procesado la prohibición de comunicarse con la víctima y aproximarse a menos de 500 metros durante 24 años.