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La DOP Aceite del Somontano pasa el corte y “viaja” a Madrid

Las alegaciones de oposición presentadas han sido todas rechazadas, con lo que, tras el visto bueno de Agricultura, solo quedará la Comisión Europea

Cosecha de olivas en Somontano.
Cosecha de olivas en Somontano.
S. E.

El BOA de este martes publicaba la respuesta final a las alegaciones presentadas por distintas entidades con respecto a la creación de una Denominación de Origen Protegida Aceite del Somontano. Con todas ellas rechazadas, la denominación ya ha “pasado el corte”, en palabras del director del Consejo Regulador de esta DOP, Carlos Domínguez.

Admite que reciben las “buenas noticias” con “ilusión”, ya que en este momento la pelota está en el tejado del Ministerio de Agricultura, que en un periodo no demasiado largo de tiempo debería dar el visto bueno. Con ese paso, el aceite somontanés ya podría comercializarse con la etiqueta de la Denominación de Origen, aunque solo a nivel nacional. Después de esto, solo quedaría esperar a que la Comisión Europea revisase el proyecto para dar el sí definitivo. Como recuerda Domínguez, “las cosas de palacio van despacio”.

La Denominación de Origen Protegida es un sello de calidad que reconocen distintas administraciones. Para los productores, es algo que da grandes facilidades a la hora de proyectar nacional e internacionalmente su aceite. En este caso, Domínguez destaca que lo que hace diferente al aceite del Somontano, no solo a nivel estatal si no también europeo, es la cantidad de variedades locales que aglutina: un total de 18, de las cuales varias son autóctonas de esta comarca del Alto Aragón. “Una de las bases de nuestra Denominación de Origen es que apostamos por mantener las variedades y las oliveras tradicionales, que también nos dan unos aceites diferentes y con la máxima calidad”, subraya Carlos Domínguez.

15 años de trabajo

Tres lustros llevan trabajando codo a codo productores, Comarca del Somontano y el CEDER del Somontano para ver, por fin, una etiqueta en sus botellas de aceite que certifique su gran calidad y les diferencie de una feroz competencia.

Distintos CEDER de la provincia de Huesca, cooperativas y empresas, presentaron alegaciones como oposición al proyecto. A su juicio, podría haber sido más beneficiosa la creación de una DOP Alto Aragón o DOP Pirineos, pero Domínguez recuerda los 15 años de esfuerzos invertidos desde el Somontano. “Hemos hecho lo que creímos más apropiado para nuestros intereses y para nuestra diferenciación”, comenta al respecto.

“Si se hubieron hecho las cosas de otra manera desde el principio podría haber sido diferente, pero esto salió como algo de la comarca. No es ni mejor ni peor, es diferente. Eso son las Denominaciones de Origen, defender el producto de un territorio”, sentencia Carlos Domínguez.

En la actualidad, el Consejo Regulador que preside se va a dedicar a implantar la normativa e ir adaptando y ajustando etiquetaje. Domínguez lo define como “un gestor que revisa las normas y actuaciones para que todos nuestros aceites estén dentro de la DOP”.

Todo ello en los albores de una campaña que no se presenta sencilla en el Somontano. Marcada por “la guerra de precios al alza” y por la sequía, será algo más corta de lo que los productores querrían. Eso sí, por la sequía, “la oliva no lleva nada de agua y será de la máxima calidad”, resalta Domínguez.