Miguel Lardiés: “Creo que siempre he vivido enamorado de la música”

Miguel Lardiés Lanuza “siempre” ha vivido “enamorado de la música”, como ha transmitido a través de un disco y cuarenta conciertos, algo meritorio teniendo en cuenta que solo tiene 19 años.

Nacido en Zaragoza el 19 de marzo de 2002 y residente en Aínsa desde entonces, el artista comenzó a interesarse en serio por la música a los 8 años gracias a su ídolo, Melendi.

“En la composición entré a finales de 2018, debido a que se me propuso componer una canción para el documental Sobrarbe Son. Fue una gran suerte descubrir este mundo y saber que componer mis canciones con guitarra o piano es sinónimo de desahogarme y de expresar lo que siento”, señala.

Hoy en día, este adolescente crea canciones de pop y rock, así como rumbas y baladas, que abordan temas propios de su edad: “Vivir el momento, crítica social, amor y desamor”.

Todos ellos aparecen en su primer álbum de estudio, Ciego el ego, grabado en el estudio Pirenaudio de Labuerda y publicado el 4 de diciembre de 2020.

“Nunca le he dedicado tanta ilusión, sacrificio y entusiasmo a algo. Creo que durante el proceso de grabación todos los sentimientos habidos y por haber estaban a flor de piel”, comenta sobre el disco, que tuvo que retrasarse a consecuencia de la pandemia.

Con Ciego el ego cree haber conseguido “una mayor madurez”, ya que prácticamente “todos los trámites necesarios” para llevar a cabo este proyecto fueron realizados por él mismo.

“No fue nada fácil siendo que era novato y había una gran cantidad de trabajo, aunque lo hacía muy a gusto”, recuerda.

Musicalmente, Lardiés ha logrado que el número de personas que le conocían antes del lanzamiento del LP “se multiplicara”, aunque piensa que “nunca es suficiente”.

“Que gente que ni siquiera conoces se sepa una canción tuya es signo de que algo bien estás haciendo”, resalta.

Desde que dio su primer concierto con 15 años, el sobrarbense se ha sentido respaldado por el público.

“Las sonrisas en canciones alegres, los rostros serios en canciones más tristes... Ver eso no está pagado”, valora.

Además de Melendi, del que dice haber aprendido “cuestiones musicales y de la propia vida, por muy raro y loco que parezca”, otro de sus referentes es La Ronda de Boltaña, un grupo “muy especial” para él.

Con la conocida banda le une su residencia en Sobrarbe, una zona que promociona en videoclips como A 100 por hora y que “completa perfectamente de manera visual el mensaje que quiero transmitir”, confirma.

“En dos de mis tres videos salen como ‘protagonistas secundarios’ los paisajes ainsetanos y sobrarbenses. Me siento muy afortunado de vivir donde vivo por el paisaje y las personas que me rodean, que también son protagonistas en mis videoclips”, cuenta.

Tras actuar hace poco en el Salón Cultural de Aínsa y en la Sala Corleone de Sabiñánigo, Miguel Lardiés ya tiene varios conciertos más apalabrados para el verano, que anunciará pronto. “En principio, todas las actuaciones serán en la provincia, aunque poco a poco me gustaría ir más allá para darme a conocer”, desea esta joven promesa de la música.