Cultura

CASTILLO DE AÍNSA

Vegetal Jam ilumina el Castillo de Aínsa con su ‘Luz del bosque’

Antes del concierto del grupo zaragozano, Xarop Teatro representó ‘Los tres cerditos’

Vegetal Jam en su actuación en el Castillo de Aínsa.
Vegetal Jam en su actuación en el Castillo de Aínsa.
S.E.

El dúo zaragozano Vegetal Jam - Miguel Guallar y David Aznar- conseguía borrar el mal recuerdo de la tormenta del día 11 ofreciendo este domingo, a las 21 horas, un concierto de violín, violonchelo y acordeón al que no le faltaron las bromas y la excelente respuesta de un público ávido de vibraciones positivas.

Durante el espectáculo sonaron ritmos tradicionales de foxtrot, vals y fandango aunque, eso sí, dotados de un toque muy singular. Y es que detrás de cada canción, una historia simpática se escondía. No se explican de otra manera los enigmáticos nombres que dan significado a las notas musicales de esta pareja artística, logrando despertar a base de bromas ocurrentemente hiladas las carcajadas de los presentes. Luz del bosque, Café con leche de avena y Langarreando son los títulos de algunos de los temas recogidos en los trabajos El alma en la lluvia, Valnerols y Danza del Bosque Encantado que se escucharon, entre un variadísimo repertorio, en el mágico e íntimo espacio del Foso del Castillo.

Solo un dato impide hablar de éxito total de este concierto. No se acabaron las entradas, algo que se entiende dado lo complicado que resulta tener una excelente entrada en un concierto en las noches de domingo. No obstante, los que asistieron se llevaron de regalo a casa algún tema fuera de guion como Chotis por el forro, que dejó el regusto de las fiestas de las que uno nunca quiere marcharse.

El público buscó la sombra durante el espectáculo de Xarop Teatre.
El público buscó la sombra durante el espectáculo de Xarop Teatre.
S.E.

Horas antes, la compañía castellonense Xarop Teatre ofreció su particular versión del cuento tradicional Los Tres Cerditos. La puesta en escena, repleta de un esmerado y colorido atrezzo, daba cabida a los protagonistas de una historia dramática de viajes en busca de un mundo mejor. Detrás de la belleza de personajes y decorados se escondía una incisiva crítica social que sin embargo no terminó de ser comprendida por un público eminentemente infantil.