Cultura

OJO AVIZOR

El Encuentro Pirenaico VillaNoir dinamiza la novela negra en la provincia

Este año han celebrado la séptima edición del festival con una gran participación

Txemi Parra junto con Rodrigo Bosque el pasado mes de octubre.
Txemi Parra junto con Rodrigo Bosque el pasado mes de octubre.
S. E.

En los últimos meses, ha proliferado (o al menos lo parece) un subgénero literario: la novela negra pirenaica. En la provincia, más concretamente, en Villanúa existe un encuentro que en pocos años se ha convertido en una referencia del género negro en este país.

El Encuentro Pirenaico de Género Negro VillaNoir está dirigido por Ricardo Bosque. Este año han celebrado la séptima edición del festival el pasado mes de octubre, y este año, como desde sus inicios, ha querido mantener la misma pretensión: llevar literatura al mundo rural.

Con todo este crecimiento, el director del Encuentro afirma que, al margen de lo que sería las grandes ciudades, que están en otra dimensión “VillaNoir está entre los mejores considerados”.

“Y no lo digo por decir sino porque porque tengo bastantes referencias de personas, por ello, considero que debemos estar muy orgullosos de lo que estamos realizando en este lugar”, asevera, Bosque.

La idea es ir cada año a más y mejorar los números y el cartel de ponentes. “Esta edición hemos superado el público de la anterior edición. Teníamos el salón abarrotado y para el año que viene tenemos prevista una ubicación un poco mayor”, continúa, a lo que añade. “Creo que Villanúa es el lugar. Para mí es como si fuese mi casa, y personalmente me apetecía hacerlo en un entorno mucho más pequeño e intentar traer autores de primer nivel”, afirma

De hecho, Txemi Parra presentó en octubre su novela, El eco de las sombras en VillaNoir. La novela está ambientada en una Jaca contemporánea en ese momento estacional en el que el verano llega a su fin y los turistas se van.

El autor en una entrevista ofrecida a este periódico, señaló que El eco de las sombras tiene la intención de motivar al lector a conocer la Jacetania. “Con la lectura mucha gente me ha dicho que ha descubierto lo que son los Ibones o palabras aragonesas como es la ‘boira’ o incluso la gastronomía”, afirmó.

Otras de las novelas destacadas es Pirineo Noir de María Pérez Heredia. La obra también está ambientada en el Pirineo, aunque esta vez en un pueblo ficcionado, As Boiras. Aquí el Pirineo, como dice su autora, se podría considerar como un personaje cruel.

Bosque destaca también la obras de Bernard Minier, superventas francés que aunque inspiradas en el Pirineo francés ayudan a consolidar este “nacimiento” literario.

Al ser preguntado sobre cuál podría ser la razón de esta proliferación de obras ambientadas en el Pirineo, el director de VillaNoir lo achaca a un aspecto endogámico.

“Eso que tienen los pueblos que todo el mundo tiene secretos y parece que es más difícil que haya asesinatos porque todo la gente te ve es un factor clave”, apunta. “Estamos acostumbrados a esas novelas negras que están ambientadas en grandes urbes y como podido consolidar una novela negra mediterránea ¿por qué no se puede consolidar una pirenaica?”, finaliza.