HUESCA.- La locura colectiva que se apoderó de El Alcoraz con el gol de Chimy Ávila en el minuto 98 del pasado sábado, que dio la victoria del Huesca ante el Sevilla, ha encontrado también su versión literaria. Bien podría decirse que Ricardo Constante es el poeta del gol sur, la ubicación que tiene en el estadio como abonado. El polifacético deportista (preside el Club Bádminton Huesca pero jugó a fútbol y se considera también futbolero), profesor de Educación Física (ya jubilado), empresario y cantautor, tiró de su talento e ingenio, contagiado por la explosión de alegría que supuso el triunfo in extremis.

Escribió en su página de Facebook un soneto dedicado a Chimy Ávila y a ese gol victorioso, aunque prevalece en la poesía la idea de equipo por encima de la individual y plasma el contraste del Carnaval para el Huesca y la Cuaresma para el Sevilla. "Me han llegado a decir que le ponga música", dice Ricardo con una sonrisa. "Mi única intensión es trasladar el ánimo al equipo desde el convencimiento de que puede pegar otro mordisco a la Liga. Es un soneto pensado con respecto al partido y al futuro del Huesca. Ese titular de "A tres minutos del cielo" es lo que nos falta para salir del descenso", señala.

"Aluciné", añade, para describir la sensación que vivió el sábado "porque ganó el Huesca en un partido irrepetible, con una emoción indescriptible y, después de toda la mala suerte que había tenido anteriormente, esta vez la tuvimos de cara".

Ricardo Constante, apasionado en todo lo que hace, también tuvo sus minutos de gloria como futbolista del Huesca, que es algo seguramente muy desconocido para la gran mayoría de los aficionados, no tanto para aquellos que fueron por El Alcoraz en el año 73 y en su memoria tienen una enciclopedia con patas. "Yo estaba jugando en la Zoiti, tendría 16 años y el Huesca, entonces en Tercera, tenía un equipo muy profesional y necesitaba algunos jugadores para compaginar la liga con el Campeonato de España de aficionados, que fue el que se ganó. Jugué cuato o cinco partidos entre marzo y abril. José Mari Mur era el presidente, Pedro Aróstegui el entrenador y en la plantilla estaban jugadores como Mendiara, Ferrer, Palacino, Cruz, Sabalete, Ausaberri, Pepín, Pedro, Delgado, los hermanos Arrayet... Me hizo mucha ilusión, pero me venía grande. Mi historia es muy simbólica, una anécdota", recuerda.

Luego se fue a Madrid, donde cursó sus estudios de INEF, a través de los cuales conoció unos años después a Javier Camarón, que entonces jugó en el Rayo y en el Alcalá. Cuando regresó a Huesca, aún llegó a jugar en el Lamusa y volvió a sus orígenes, a la Zoiti, en la liga local, causando estragos con su velocidad como buen extremo.

"Siempre me ha gustado el fútbol. Lo que ahora hay en Huesca es otro mundo", dice Ricardo Constante, entusiasmado también por poder disfrutar con el ambiente que se vive los días de partido en El Alcoraz. "No me gustan los malos modos. Y veo que la afición está volcada con el equipo, con un apoyo y una comprensión extraordinarias y muy respetuosa a pesar de que el equipo lleva prácticamente toda la liga como colista. Y el equipo responde desde la humildad y la modestia con una garra increíble. Creo que todos estamos disfrutando del momento, que para eso llegamos hasta aquí".

Como entusiasta seguidor destaca la transformación que ha experimentado el Huesca y su evolución. "Los últimos fichajes han renovado el derrotismo que se había instalado. Se ha juntado a estos jugadores el trabajo que se había sembrado con la llegada de Francisco y también esa fortuna que hay que tener. Porque marcar un gol como el del Chimy en el 98, es algo increíble. Fue ilusionante. Ahora se está abriendo la esperanza y ese soneto no es sino una expresión de la alegría que sentí".

A TRES MINUTOS DEL CIELO

"La Cuaresma ha empezado hoy en Sevilla

Pero en Huesca hay resaca a Carnaval

Canta GOOOL la afición por seguidillas

Baila jota el Alcoraz con Don Carnal

El Chimy hoy ha puesto la puntilla

Argentina abre en Huesca sucursal

Qué más da si le cae otra amarilla

Mientras tenga en el Gol-sur, su Santo Grial

Aplacemos el entierro y la sardina

Que este equipo va a montar un basilisco

Con el cierzo bien cargao de adrenalina

Con la táctica y las ganas de Francisco

Sin el Var, sin reblar y sin propinas

Van a darle a la Liga otro mordisco".