Huesca

CRISIS DEL CORONAVIRUS

Badiola no descarta un confinamiento domiciliario ante el colapso sanitario

Badiola no descarta un confinamiento domiciliario ante el colapso sanitario
Badiola no descarta un confinamiento domiciliario ante el colapso sanitario
P.S.

HUESCA.- El director del Centro de Encefalopatías y Enfermedades Transmisibles Emergentes de la Universidad de Zaragoza, Juan José Badiola, no descarta que el Gobierno de Aragón se vea obligado a decretar en una semana, una vez pasado el puente de Todos los Santos, un confinamiento domiciliario debido al colapso del sistema sanitario.

Esta drástica medida interrumpiría la cadena de transmisión "desbocada" y "acelerada" del virus, señala el experto, que puntualiza que el confinamiento podría ser diferente al que tuvo lugar en marzo, "pero en cualquier caso sería necesario limitar la movilidad y los contactos lo máximo posible".

Por el momento, Juan José Badiola aplaude tanto los confinamientos perimetrales impuestos por el Gobierno de Aragón como el toque de queda, medidas "que tal vez nos den la sorpresa de que la curva de contagios empieza a descender de una manera franca".

Como todavía no hay resultados sobre la eficacia de estas limitaciones, no descarta un próximo confinamiento domiciliario, al igual que ha sucedido en Francia, donde se activó este jueves. "Si no hay respuesta, no veo otra solución mejor. Ya hemos recurrido al confinamiento perimetral para reducir la movilidad, hemos bajado los aforos, hemos reducido las noches, y ya no sé qué más se puede hacer", confiesa.

En su opinión, la situación de la enfermedad en Aragón hay que calificarla como de "muy preocupante", con un marcado aumento de fallecidos, y hace alusión a la tasa de incidencia de la pandemia en la comunidad "que nos sitúa los terceros de España", advierte. Esta situación, continúa, "es grave. No quiero dramatizar, pero es muy preocupante y, sobre todo, hemos superado los tres estándares que marcó el Ministerio de Sanidad". Se refiere así, a la tasa de incidencia acumulada en los últimos catorce días, que se ha situado en 1.030 casos diagnosticados por 100.000 habitantes, y a la tasa de positividad, que el Ministerio fijó en un 10 % y que en Aragón roza el 20 %. "Esto es lo que empieza a preocuparme mucho", confiesa el experto, que se refiere además al elevado uso de las UCI, que en Aragón rondan una tasa de ocupación del 40 %.

Por todo ello, aprueba las últimas medidas restrictivas tomadas por el Gobierno de Aragón. "No había más remedio, y aún hay que ver si son suficientes", insiste Juan José Badiola.

Los toques de queda, dice, "están de moda". "Se están imponiendo en Francia y en otros países de Europa y tratan de evitar la celebración de fiestas por la noche en lugares incontrolados, que se ha visto que es una ocasión para los contagios", comenta. Respecto a los confinamientos perimetrales de las tres capitales aragonesas considera que no tenían mucho sentido de forma aislada, por lo que se ha impuesto la medida en toda la comunidad.

"Al fin y al cabo es ir en la tónica sobre la que están yendo nuestras comunidades vecinas, sobre todo Navarra, La Rioja y País Vasco, toda esta zona del valle del Ebro. Es conveniente tomar medidas lo más parecidas posibles, entre unos y otros", manifiesta.

Respecto a la situación de las UCI en los hospitales aragoneses recalca que le preocupa mucho la ocupación actual que registran estas unidades tanto en Zaragoza, como Huesca y Teruel y se muestra "bastante pesimista al respecto".

"Es muy preocupante que las UCI estén ya casi al límite, esto es un índice que conduce mucho al pesimismo porque quiere decir que si en un momento dado no hubiera ya camas disponibles una persona infectada de covid que necesitara una plaza no podría ir, y no solamente esto, sino que sucedería lo mismo con un paciente que le dé un infarto o un ictus, o cualquier incidente de salud que requiere el internamiento en una UCI", plantea.

Por todo ello, señala que "si realmente esta situación se agrava probablemente la comunidad no tenga más remedio que declarar un confinamiento domiciliario, parecido al que tuvimos en marzo".

Juan José Badiola plantea que al presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, no le gusta mucho esta medida. "Entiendo sus razones porque esto implica un trastorno para los ciudadanos y para los elementos económicos, pero es que a lo mejor no hay más remedio", dice.

Desde este punto, recuerda que "el elemento clave, la razón por la cual se decretó el confinamiento del mes de marzo fue el temor al bloqueo del sistema sanitario, ese es el punto clave".

Añade que, "si realmente la autoridad sanitaria, en este caso la consejería de Sanidad del Gobierno de Aragón, ve que está en peligro el desbordamiento de los hospitales no va a tener más remedio que confinar a los ciudadanos en sus casas para cortar la cadena de contagios".

Considera que además de los muchos asintomáticos que pueden expandir el virus sin darse cuenta, actualmente la segunda ola de la pandemia ha dado un giro "y empieza a haber bastantes enfermos de edades superiores que presentan evidentes signos de enfermedad y que, en algunos casos, es necesario hospitalizarles".

LA NAVIDAD, "MUY PARCA"

Juan José Badiola opina que la próxima Navidad "tiene que ser muy distinta a la de otros años, muy parca y escueta en las reuniones".

Los banquetes familiares, las comidas de amigos o las cenas de empresa, de momento, deben quedar en el aire.

"De eso de reunirnos, que se olvide la gente, porque ni es ni debe ser. Ni aunque estuviéramos bien, porque este es un virus extremadamente contagioso y a la menor oportunidad que se le da la aprovecha, y si hay reuniones de personas, con que haya un infectado ya la hemos liado", explica. Así, advierte que en estas fechas habrá que tener mucho cuidado con las personas mayores, "que son las que corren mayor peligro".

¿QUÉ SE HA HECHO MAL?

Este gran experto en epidemias pone de manifiesto que actualmente "tenemos una cadena de transmisión desbocada y a lo mejor no estamos adoptando las medidas correctas. Debe haber bastante transmisión comunitaria, acelerada y descontrolada, y después están los que no cumplen los aislamientos ni las cuarentenas, las reuniones de amigos, las familiares o quienes no usan las mascarillas adecuadas". Así, "vas sumando y sumando factores y a final este es el resultado", afirma Juan José Badiola, que recuerda que desde el pasado 22 de octubre la comunidad se mantiene en una media de unos mil casos nuevos diarios. "Hay que presentar combate al virus, poner los medios que estén en nuestra mano para atajar esta expansión, y eso requiere medidas apropiadas, monitorización de estas restricciones, para ver cómo están funcionando, y después responsabilidad social. La cifra de fallecidos va en aumento y la sociedad aragonesa tiene que reaccionar", plantea.

Para este experto el binomio de salud/economía ya no es válido. "Creo que no hay que dañar excesivamente la economía, en eso estoy de acuerdo, pero lo prioritario es el mantenimiento de la salud, para mí está muy claro", concluye.