Huesca

CONCURSO

El ingenio y mensaje de Valeria Corrales “flipa” a Got Talent

La joven oscense provoca un sí entusiasta de Dani, Edurne y Risto Mejide

Valeria Corrales, con Dani Martínez, Edurne y Risto Mejide en Got Talent.
Valeria Corrales, con Dani Martínez, Edurne y Risto Mejide en Got Talent.
Telecinco

Quiero que las niñas se den cuenta de que la tecnología no es sólo para chicos”. La joven oscense Valeria Corrales, de 11 años, “Inspiring Girl” por su vocación y su gran progreso, asombró de entrada a los miembros del jurado de Got Talent que, en su valoración, otorgaron con entusiasmo el sí al pase de ronda después de la exhibición del robot fabricado por la alumna de Minivinci que resolvió el cubo de Rubik en 26 movimientos. Talento que fue reconocido unánimemente por Dani Martínez, Edurne y Risto Mejide.

La actuación de Valeria fue deslumbrante desde el momento en el que, entre bambalinas, regaló una corbata con luces led a Santi Millán. A partir de ahí, entró al escenario, bajó junto a los jueces y les explicó que, al no poder resolver un cubo de Rubik que le regalaron, decidió crear un robot que lo hiciera en tiempo récord. Sensores de color, de infrarrojos, dos motores y una CPU (ordenador) lograron componer el cubo previamente desordenado por Edurne, que repetía constantemente: “Flipo”. Y lo hicieron en los 26 movimientos anunciados por Valeria.

La joven demostraba así que la tecnología “no tiene límites y se pueden hacer un montón de cosas que seguro les encantan”.

Al aplauso del público le sucedió una nueva exhibición del talento de Valeria, que entregó tres obsequios a los jueces. A Dani Martínez, una bombilla que, al agitarla, da la respuesta a sus vacilaciones sobre el sentido del voto. Al hacerlo, apareció “Vota sí”. A Edurne un corazón inspirado en el hermano de la concursante, Gonzalo, admirador de la cantante. Gonzalo estaba entere bastidores con sus padres, Gonzalo y Teresa, y Patricia Heredia, la ingeniera que dirige Minivinci. En el caso de Risto Mejide, fueron unas gafas con una batería que, encendida, repetía “El sí de Risto”. Conocida la poca prodigalidad en la afirmación del severo juez, el invento despertó su sonrisa y admiración, aunque en tono jocoso aseguraba que “las gafas no funcionan bien”, básicamente porque tanto sí quizás vaya contra su naturaleza.

Valeria, que se ganó la simpatía de un público reducido, aguardó el veredicto. Dani y Edurne registraron su sufragio afirmativo en complicidad con el hermano de la concurrente, Gonzalo. A la hora de la verdad de Risto Mejide, el emblemático comunicador fue contundente. “Estoy impresionado. Como bien has dicho la tecnología no es para chicos y está para hacernos la vida más fácil. Sobre todo para que gente con creatividad, ingenio y mucho futuro nos demuestre que todo no está inventado”. El talento de Valeria tiene otro reto por delante.