Los empresarios oscenses califican de “absurda” e “inconstitucional” la petición de sancionar a las empresas que rechacen volver a Cataluña
Manuel Rodríguez Chesa y Salvador Cored piden a la Administración que garanticen “estabilidad” para que los empresarios puedan trabajar
La petición de Junts al Gobierno central de que se sancione a las compañías que trasladaron fuera de Cataluña su sede social y se nieguen a regresar ha causado cierto estupor en el sector de la empresa altoragonés. El presidente de la Cámara de Comercio de Huesca, Manuel Rodríguez Chesa, califica la reclamación de “absurda”, mientras que el director general de Ceos-Cepyme Huesca la considera “directamente anticonstitucional”.
“La medida atenta contra la libertad de las empresas a establecerse dónde y cómo quieran”, afirma Cored, y apunta que “el Gobierno no debería entrar en esta cuestión si quiera porque es resulta descabellada”.
En la misma línea se expresa Rodríguez Chesa. “Es absurdo que impongan condiciones a los empresarios de dónde debe estar su ubicación, la Administración lo que tiene que hacer es marcar unas pautas claras a las empresas para que puedan desarrollar su actividad”, subraya al tiempo que resalta que “la empresa lo que quiere es trabajar con orden, tranquilidad y estabilidad”, algo que “desgraciadamente no se está dando”.
Ni el presidente de la Cámara de Comercio ni el director general de Ceos Cepyme han podido concretar la cifra exacta de empresas que han cambiado de domicilio social o trasladado su actividad a la provincia de Huesca desde que comenzó el proceso soberanista de Cataluña, conocido como el ‘procés’, que se materializó el 1 de octubre de 2017 con el referéndum de independencia.
No obstante, coinciden en que mayoritariamente se trata de casos de modificación de la dirección postal de las empresas y que la repercusión es “escasa” para la economía altoaragonesa. “No así para Cataluña –advierte Cored-, ya que desde hace más de seis años está sufriendo un goteo constante de empresas que se van del territorio o cambian su sede por la inseguridad jurídica que sufren y que con los últimos movimientos de Junts no hace más que acrecentarse”.
El presidente de la Cámara de Comercio de Huesca dice que hasta el momento ninguna entidad le ha manifestado su deseo de volver a Cataluña, en cambio, asegura que sí tiene constancia de “más de un empresario” que “está pensando en echar el cierre o reducir su actividad por todos los problemas que está teniendo”.
Por ello, insiste en la necesidad de dejar a las empresas trabajar. “Basta de tonterías y de jugar al despiste, la empresa necesita un marco con unas directrices claras que le aporten seguridad y estabilidad para poder rendir, contratar personal y pagar sus impuestos”, concluye Rodríguez Chesa.
