Formar más sanitarios, entre los retos de la Universidad de Zaragoza

La formación de un mayor número de profesionales sanitarios para dar respuesta a la falta de titulados en medicina y enfermería en los centros sanitarios de Aragón, especialmente en las zonas rurales, y el desarrollo de grados tecnológicos como la ingeniería informática son dos de los retos más importantes a los que se enfrenta en el presente la Universidad de Zaragoza (UZ). Así lo han puesto de manifiesto este martes el presidente de Aragón, Jorge Azcón, y el rector de la UZ, José Antonio Mayoral, durante el acto solemne de celebración de la festividad de la institución universitaria aragonesa, la de San Braulio.

En su intervención, Azcón ha destacado el marco de colaboración existente entre el Ejecutivo regional y la Universidad de Zaragoza para potenciar, desde una posición de respeto a la autonomía universitaria, las referidas titulaciones universitarias y dar respuesta así a las demandas de la sociedad aragonesa.

“Hemos dado un paso relacionado con las tecnologías, pero queremos que se extiendan a lo largo de los próximos años para ayudar a generar un ecosistema en torno a este campo que va a ser fundamental”. El responsable político ha destacado que el segundo reto a afrontar por la UZ en colaboración con el Gobierno aragonés es ampliar el número de titulados en medicina y enfermería a fin de hacer frente a la problemática derivada de la falta de profesionales en los centros sanitarios de la Comunidad, con mayor incidencia en las zonas rurales, y de las jubilaciones que se van a producir próximamente en el sector.

En este sentido, ha valorado los acuerdos desarrollados para impulsar la carrera completa de Medicina en el campus de Huesca a partir del próximo año, así como los esfuerzos del Gobierno aragonés para incrementar el número de plazas para acceder a estos estudios.

Por su parte, el rector de la Universidad de Zaragoza ha valorado la colaboración con el Gobierno aragonés, pero ha advertido al tiempo que la institución académica requiere de “miradas a largo plazo y no soluciones a corto” a la hora de conseguir objetivos como la ampliación y desarrollo de las carreras tecnológicas como la ingeniería informática y matemáticas. A su juicio, “es imprescindible un visión generosa del Gobierno y de las autonomías para impulsar la universidad, porque es un recurso para el desarrollo económico y la transferencia de conocimientos a la sociedad que no se debe perder”. Ha admitido que para desarrollar este trabajo es imprescindible el apoyo de las administraciones públicas, y ha subrayado a renglón seguido que es necesario que la universidad sea transparente con la administración de los recursos públicos.