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COLABORAn: DIPUTACIÓN PROVINCIAL DE HUESCA Y CAJA RURAL DE ARAGÓN

Diez colegios de la provincia de Huesca abrirán con seis o menos alumnos

#CONTRALADESPOBLACIÓN

Plan, Pallaruelo de Monegros y Valcarca, con cuatro escolares, son los centros más pequeños
Plan, Pallaruelo de Monegros y Valcarca, con cuatro escolares, son los centros más pequeños
S.E.

La amenaza de cierre se cierne desde hace años sobre algunos centros de la provincia de Huesca que reabrirán el miércoles con pocos alumnos. Con planes educativos o con iniciativas para asentar población, algunos resisten. Los colegios de Sesa y Chalamera contarán con seis alumnos; y con cinco, en Laluenga, Estada, Estopiñán del Castillo, Montesusín y Orillena. Los colegios más pequeños, con cuatro estudiantes, serán los de Plan, Pallaruelo de Monegros y Valcarca. La gran sorpresa para este curso es la del colegio de Senegüé. El día 27 de agosto, en la rueda de prensa del inicio del curso, Educación apuntó que empezaría con tres. Pero el empeño de su maestra Virginia Blanco, con el apoyo de dicho departamento del Gobierno de Aragón, y con la respuesta de las familias ha hecho que vaya a empezar con ocho. La clave ha sido la puesta en marcha de un proyecto educativo.

Con todo, en estos pueblos sobre los que pesa la amenaza, la preocupación continúa. Algunos tienen el problema resuelto para pocos años y otros se lo pueden encontrar el curso que viene. En algunas de estas localidades no lo tienen fácil para asentar población, porque a veces llegan familias a trabajar en explotaciones y no permanecen muchos años. En Pallaruelo de Monegros, desde el Ayuntamiento de Sariñena al que pertenece y en colaboración con las familias de los cuatro niños que acudirán este curso a la escuela, se están moviendo para conseguir que llegue alguna otra familia con niños, pero no es fácil. La falta de vivienda en el medio rural, y en esta población monegrina en concreto, tampoco ayuda.

Educación recalca que la decisión de mantener abiertas las escuelas con solo tres alumnos, tomada en 2015, “supone una de las mejores medidas en la lucha contra la despoblación”, señaló el consejero, Felipe Faci.