Los multiservicios, un dique aragonés contra la despoblación

Han pasado ya dos décadas desde el nacimiento del proyecto de multiservicios rurales. Fue en la provincia de Teruel, fruto de una iniciativa de su Cámara de Comerico, que identificó la necesidad de suplir con una colaboración público-privada la sangría de comercios rurales que echaban el cierre.

No tardó en expanderse al resto de provincias aragonesas. Ayuntamientos de menos de 500 habitantes solicitaban unas ayudas para poder tener algún comercio en el pueblo, con el objetivo de ofrecer un servicio a sus habitantes.

Así, con la colaboración del Gobierno de Aragón o, en algunos casos, de las Diputaciones Provinciales, se reforma y equipa un local comercial que permita crear la tienda. Tras ello, se busca a una persona que quiera gestionarlo, siempre con el acompañamiento de la Cámara de Comercio Provincial.

Según explica Paula Lacasa, responsable de Servicios Sectoriales de la Cámara de Comercio de Huesca, el nombre de multiservicios deriva de que “para conseguir una mayor rentabilidad, a veces se junta con el bar, con apartamientos turísticos o con un hostal”.

Un proyecto reconocido

En estos 20 años han participado en el programa europeo SARURE, con el que sirvieron de inspiración a las zonas rurales de Polonia, Grecia, Irlanda. También a la provincia de Soria, que se mostró muy interesada en implementarlo tras un reciente encuentro que tuvo lugar en Teruel.

Además de múltiples reconocimientos, a principio de este mes de octubre los III premios al Comercio de Aragón destacaron su importancia con el galardón extraordinario.

En el Alto Aragón hay un total de 28 multiservicios, todos en pueblos de menos de 500 habitantes que se habían quedado sin establecimientos. Para Paula Lacasa, un proyecto esencial “para que los pueblos no se queden sin comercio”.