Huesca

CORONAVIRUS

Enfermería pide que los farmacéuticos hagan test de antígenos

El Consejo General de Enfermería solicita al Gobierno que regule los precios de las pruebas de autodiagnóstico

Test autodiagnósticos en la farmacia Compairé de Huesca.
Test autodiagnósticos en la farmacia Compairé de Huesca.
Pablo Segura

El Gobierno aprobaba hace unos días la venta sin receta de test de antígenos en oficinas de farmacias con una normativa que se limita a aprobar de forma exclusiva la venta de dichos productos para que los ciudadanos se hagan las pruebas en sus casas, de hecho, la recomendación es que no sea la persona sospechosa de estar infectada quien se desplace a hacer la compra.

Así, “en ningún momento la nueva norma del Gobierno regula, ni permite ni ampara la realización de estos test por parte de los farmacéuticos en sus establecimientos privados, ni tampoco el acceso de estos profesionales a la historia clínica del paciente para comunicar resultado alguno”, denuncian desde el Consejo General de Enfermería. Es por ello que, desde la profesión enfermera, quieren poner de manifiesto que dos Comunidades Autónomas, concretamente Galicia y Murcia, “han decidido ir más allá de lo regulado por el Gobierno y están permitiendo que los farmacéuticos realicen dichos test en sus establecimientos comerciales y recojan datos del paciente y acrediten los resultados a la sanidad pública”, explican, y recuerdan que las farmacias son comercios con un flujo importante de clientes que acuden a comprar todo tipo de productos y que la principal vía de contagio del covid es a través de los aerosoles. Por ello, la realización de test de antígenos a personas sospechosas de estar infectadas requiere una serie de circuitos y medidas de seguridad para garantizar la seguridad y la salud del resto de los clientes de las farmacias.

Regulación del precio

Finalmente, el Consejo también solicita al Gobierno y a Sanidad que aprueben “de forma urgente” normas para la regulación del precio de los test de antígenos vendidos en farmacias o realizados en establecimientos sanitarios “ante la situación de brutal especulación que se está llevando a cabo con fluctuación de precios, en ocasiones desorbitados”, así como “situaciones de reventa a precios abusivos en locales de ocio nocturno”.