Ambiente festivo en la calle gracias al Green Friday del comercio

“Uno de los días más bonitos, tanto para los comerciantes como para la ciudadanía”. Así definió Susana Lacostena, presidenta de este sector, lo que es el Green Friday. Una cita que ya se ha convertido en tradicional enmarcada en los días de prelaurentis.

Una jornada que ayer sirvió como “empujón” en un verano donde las ventas no han ido como a los comerciantes les hubiera gustado. “A partir del 15 de julio se notó un bajón importante”, reconoció Lacostena, poniendo de manifiesto que el incremento de los precios generalizado ha hecho que la gente prefiera ahorrar.

“Por eso el día de hoy -por ayer- es muy importante para los comerciantes”, subrayó, porque es un acto ya muy próximo a las fiestas de San Lorenzo y la gente “está animada” y, para incentivarles, los puestos tenían “mucha ropa blanca”. Es más, la presidenta apuntó cómo había oscenses que ya a las 9 de la mañana, una hora antes de que los puestos abrieran al público, “ya querían comprar”.

Luis Felipe, alcalde de Huesca, tampoco quiso perderse esta cita y pudimos verle recorriendo las diferentes calles de la ciudad donde estaban ubicados los puestos de los comercios.

“Es un día para apoyar a este sector cuya actividad es fundamental para la economía”, apuntó, recordando que, durante los dos años de pandemia, los comerciantes “han colaborado y luchado para que sus puertas permanecieran abiertas”. En este sentido, mostró su agradecimiento por la colaboración continua que han mantenido en este tiempo con las administraciones públicas a la hora de crear iniciativas. Destacando, como no podía ser de otra manera, los Bonos Impulsa, que se agotaban en tan solo unos segundos cada vez que se ofrecían al público.

“Solo blanco y verde”

En muchos de los puestos se encontraban “solo prendas de blanco y verde”, como dijo Celia Lacampa, de Celia Metamorpho, quien a su puesto únicamente llevó ropa y accesorios laurentinos. “Tras dos años sin fiestas, hay que volver a un San Lorenzo totalmente normal”, apuntó, por ello, “ni se planteó llevar prendas que no fueran de San Lorenzo”.

Así mismo, Bastían Díaz, de Estudio 28, resaltó la gran cantidad de mochilas que vendieron durante toda la jornada. “La gente tiene ganas y ha sido todo un éxito”, finalizó.