Cultura

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La fiesta de las letras pone punto final a su 38 edición de Feria del Libro de Huesca  

El premio al Libro Altoaragonés del Año 2021 fue para la escritora Rosario Raro

Organizadores de la Feria del Libro de Huesca posan con el galardón que Rosario Raro no pudo recoger este domingo.
Organizadores de la Feria del Libro de Huesca posan con el galardón que Rosario Raro no pudo recoger este domingo.
S.E.

La 38 Feria del Libro de Huesca cerró sus puertas este domingo hasta el año que viene con una ceremonia de clausura en la plaza Luis López Allué. Ante un cielo amenazante por lluvias, se hizo entrega del premio al Libro Altoaragonés del Año 2021 a Rosario Raro, por la publicación El cielo sobre Canfranc.

Desde su inauguración el pasado 3 de junio, han sido más de 60 autores y un total de 16 casetas de libreros y editores los que han participado en la cita. Además de presentaciones y firmas de libros, la Feria ha disfrutado de talleres, mesas redondas, cuentacuentos y conciertos. También con la presencia incontestable del público, con una asistencia destacada jornada tras jornada.

Concierto de Olga y los Ministriles ayer en la plaza Luis López Allué, al término de la Feria.
Concierto de Olga y los Ministriles ayer en la plaza Luis López Allué, al término de la Feria.
P.B.

Escritores, libreros y editores resaltaron este domingo “el regreso a la normalidad en esta edición”, en todos los sentidos, ya que, como suele ser habitual en cada Feria del Libro, no faltaron las lluvias y altas temperaturas desde el primer día.

“El público de Huesca ha respondido de maravilla, prácticamente como en los años prepandemia, y es de admirar”, remarcó Fernando Arguis, propietario de Santos Ochoa y portavoz de la organización.

Para su sorpresa, este año hay libros que no estaban en las apuestas y se han vendido bastante, como La ladrona de huesos de Manel Loureiro. Pero sin duda, el éxito de la Feria ha sido Rosario Raro, que estuvo en Huesca firmando y se lleva un premio “muy merecido”, ensalza Arguis.

Una de las particularidades que tiene la Feria es que cada caseta ofrece un producto diferente, por lo que el público tiene más facilidad para encontrar sus gustos, subraya el gerente de Santos Ochoa. “Los más jóvenes han aparcado lo digital para regresar al papel, ahondando en los temas que les gustan y trabajando así su espíritu crítico. Al final, son los lectores del futuro”, añade Arguis.

Lo más vendido

Los mismos motivos para celebrar tiene Ludi Escartín, propietaria de Másdelibros, que ha conseguido acercarse a las cifras de la Feria de 2019. Los temas aragoneses, la novela negra y la narrativa actual han sido los principales reclamos de los clientes, advierte la librera, que este año ha reservado un espacio para el cómic. “Hemos aprovechado el crecimiento de este género para dedicarle un hueco reservado en esta Feria”, puntualizó la gerente.

Otro de los protagonistas fue la literatura infantil y el fenómeno de los ‘youtubers’, cuyas ventas son “extraordinarias” y los jóvenes tienen claro “por donde se quieren decantar”.

“El papel aguanta, los padres ayudan y fomentan la lectura. Además, las series y plataformas nos ayudan a atraer nuevos lectores”, advierte la librera.

Los últimos autores que acudieron a su cita con los lectores fueron Fernando Alvira, autor de Huesca. Fotografía de una ciudad, Rubén Calle Prado, escritor de Terrorismo Internacional, y Alberto Martínez Marzal, con Piezas de museo y Me queda tu voz. Todos ellos destacaron el “buen momento” que viven las letras hoy en día y la alegría que les produce “volver a reencontrarse con los lectores”. “Todos los días hemos encontrado un público muy dinámico, con un gran interés por los temas que se han presentado. El día ha acompañado y la gente tiene ganas de conocer”, apostilló Fernando Alvira.

Olga y los Ministriles participaron este domingo en la jornada de clausura de la 38 Feria del Libro de Huesca con su espectáculo La voz de los poetas. El grupo oscense ofreció un repertorio que pocas veces realiza en directo, basado en su mayoría en su tercer disco de estudio, Es a veces amar (2014).

Este álbum contenía once poemas de otros tantos poetas aragoneses contemporáneos, musicados por Gabriel Sopeña. Así, la banda regaló al público un concierto más “literario” y menos folk, con varias canciones de autor.