Huesca

CORONAVIRUS

La vacuna lleva a mínimos la letalidad en las residencias de Aragón

Con una inmunización contra la covid cercana al 100 %, en cuatro meses han muerto 14 aragoneses

Vacunación en una residencia de mayores de Jaca a finales del mes de abril.
Vacunación en una residencia de mayores de Jaca a finales del mes de abril.
R.G.

Hablar el año pasado de residencias era informar de brotes, aislamientos casi totales del exterior -exceptuando el suministro y la visita de sanitarios- y sobre todo muertos, muchos muertos. La covid se ensaña especialmente con los más mayores y obviamente el golpe es peor donde más concentrados están: las residencias de la tercera edad. La campaña de vacunación, que empezó ahora hace medio año, arrancó precisamente en estos centros. 

Ese muro de contención contra el coronavirus tiene un primera piedra con nombres propios en la provincia: Lidia Navarro y José Bruballa, de la Residencia Somontano de Barbastro. Fueron los primeros altoaragoneses a los que se les suministró la vacuna y ahora, medio año más tarde, el 93,3 por ciento de los aragoneses mayores de 80 años ya tiene al menos la primera dosis y el 92,1 por ciento ha completado la pauta. En la provincia, 7.274 dosis se han administrado a residentes y el porcentaje de inmunizados (es decir, dos dosis) roza el 100 % desde finales de febrero.

El panorama negro que hubo durante todo el año pasado comenzó a cambiar de forma radical con la llegada de la vacuna el 27 de diciembre de 2020, el mejor regalo de Navidad que podían tener estos centros. La situación cambió poco a poco las primeras semanas, pero después, conforme las vacunas dejaron de llegar con cuentagotas, el miedo más que fundado fue dejando paso a la ilusión, unos reencuentros con los familiares menos engorrosos e incluso las salidas para dar un paseo o para comer con la familia en casa. Y sobre todo, menos contagios y menos muertos.

Los datos hablan por sí solos: desde que comenzaron a ponerse las vacunas hasta el 20 de mayo han muerto 183 residentes en Aragón, pero 169 de esas defunciones -el 92 %- fue entre el 30 de diciembre y el 25 de febrero, cuando la campaña de vacunación estaba dando sus primeros pasos. Desde esa segunda fecha -cuando el porcentaje de residentes inmunizados con las dos dosis casi alcanzó el 100 %-, el número de residentes que han muerto ha caído a 14 en cuatro meses e incluso ha habido cinco semanas sin fallecimientos por covid en las residencias aragonesas.

Por comparar con la situación previa, en los seis meses anteriores al inicio de la campaña de vacunación fallecieron en Aragón 576 residentes.

Una evolución similar se da en la cifra de residentes que se hospitalizaban por la covid y en la de brotes y contagiados. El dato más reciente de la DGA habla de 3 ingresados, mientras que el 30 de diciembre se contaban 73. En cuanto a brotes, 43 residencias tenían abierto uno a 30 de diciembre (con 1.172 residentes contagiados) y en estos momentos hay 13 brotes con 68 infectados.

La letalidad cae en las edades más avanzadas

Por edades -con independencia de si la persona está en residencia o no-, el 92,1 % de los aragoneses mayores de 80 años tiene la pauta completa, al igual que el 87,9 % de las personas de entre 75 y 79 años y el 81 % de los aragoneses de 70 a 74. Los porcentajes caen sensiblemente en las siguientes franjas de edad: 30,9 % de 65 a 69 años y 9,5 % entre los de 60 y 64.

Aunque todavía faltan muchas personas por vacunar para alcanzar la inmunidad de grupo, la protección alcanzada en las edades más avanzadas, más vulnerables ante la covid, ha permitido que los contagios y las defunciones hayan caído a los niveles más bajos de la pandemia.

La comparativa de los datos con anteriores momentos de la pandemia es palmaria: en la ola de noviembre, de unas seis semanas de duración, murieron en Aragón 624 personas de más de 80 añosEn total, la covid se llevó por delante a 869 personas en alrededor de mes y medio, y siete de cada diez tenían más de 80 años. Además de los 624 fallecidos de más de 80 años, la ola de otoño -la más letal en la provincia- también causó la muerte de otros 144 aragoneses de 70 a 79 años y otras 69 de personas de entre 60 y 69 años.

En los seis meses siguientes desde que se puso la primera vacuna han fallecido otras 912 personas por covid en la comunidad, ligeramente más que los muertos en ese mes y medio de la ola de otoño. Y los datos van a la baja conforme la campaña de vacunación avanza e incluso acelera su ritmo: en el último mes, el número de decesos ha disminuido hasta 81 en Aragón.

En cuanto a la contagiosidad, en la ola de otoño, de los 36.345 infectados en todo Aragón, 4.878 tenían 75 años o más, el 13,4 % del total, mientras que en las últimas semanas el porcentaje de contagiados mayores de 75 años ha caído a la mitad (el 6,4 %) y también ha menguado el número de contagiados (804).

Otro dato que ilustra ese gran descenso de la letalidad es el de las muertes por 100.000 habitantes según edades. A mediados de la ola de otoño, 799 de cada 100.000 aragoneses de 95 años o más morían cada 14 días por covid y los datos más recientes de fallecimientos -26 de abril- han retrocedido hasta los 19. Entre los aragoneses de 85 a 94 años, estas cifras han bajado de 354 a 23, mientras que para la franja de edad de 70 a 84 la caída es desde los 66 hasta los 11. Con 776.710 dosis administradas en toda la comunidad (272.561 de ellas de pauta completa), la letalidad ha retrocedido a un tercio, pasando de los 3,5 fallecidos cada 100 contagios que había en el momento de ponerse la primera dosis a las 1,3 muertes por 100 casos del 25 de abril, dato más reciente de letalidad a 30 días en el data covid de la DGA. l